domingo, 7 de octubre de 2012

Todo tan triste, tan solo, tan quieto.
¿Cómo decirlo sin volver a las frases hechas,
sin redundar(me)?
¿Cómo escapar de los viejos recursos?
Es la tristeza perenne, eterna,
inherente a todos los seres humanos.
La que el tiempo afila
haciendo que corte
cada vez más.
¿Cómo escribir sin convocar a la tristeza?
¿Cómo explicarla, (si se repite)
sin redundar?
Yo que no sé comparaciones
ni analogías.
Yo que escribo
para moverme
y no ser tan piedra.
¿Cómo me nombro,
y a la tristeza,
sin redundar?

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