sábado, 23 de julio de 2011

Aves y cielo: tragicomédico rumbo anecdótico de un tonto ciego.

Aves y cielo: tragicomédico rumbo anecdótico de un tonto ciego.

De las palomas:
rescata la voz, cuando sonidos mucho más ricos emiten sus picos
tragando el arroz.

De las nubes:
percibe, sólamente, la textura de sus pasos, de sus roces; de igual forma,
en los abrazos que recibe de cualquier otra criatura, se reduce a ver las voces.

De la lluvia:
escucha lo que dice el agua que golpea con sus dedos menudos en los vidrios.
Plantea, con sus miedos, escudos de AluminioparaqueelSolseerice; forjados para lucha en el fuego de la fragua.

Si bien el tonto ciego se da cuenta, es evidente, de que ver no es requisito ante el sentir; el oír no representa la única manera de integrar el Universo que, exquisito y de repente, como un juego, en un verso desespera.

domingo, 17 de julio de 2011

Viento

Juguetea en la caída del pelo de la memoria
remueve aquello perdido aquello escondido
aquellas historias

Desparrama por todo el mundo todas las hojas y sus secretos
discurriendo entre ministerios y sus misterios
y sus objetos

¿Desde cuándo es culpa del viento que la manzana caiga del árbol?
¿Cómo es eso de que las aves ya no saben como llegar?

Como un roce, susurro, presencia,
o un tornado, chocante, violento,
la verdad, la actitud, la consciencia
ofrece a quien lo escucha, el viento.

jueves, 7 de julio de 2011

Sangre de los ángeles que fuimos cuando aún no sabíamos que sabíamos morir

Tres días en el medio del campo con la gente que uno ama

y después un recital impresionante con la gente que uno ama

hace bien.

miércoles, 6 de julio de 2011

Volver y volver a volver

Que los días más felices de mi vida
se condigan con los más
tristes,

que ser la mejor persona que conociste
signifique del mundo
la peor,

que ya ni un beso
ni la poesía
me ayuden,

¿Está bien?