La noche comienza a cubrirlo todo.
El cielo, ya cansado, no se resiste.
Las flores acusan recibo, cerrando sus ahora grises pétalos, tapando su centro, ahogando su néctar.
Las aves acusan recibo, abandonando de a poco los colores de sus plumas en hoyos de la tierra.
Acusa recibo la mariposa blanca, el murciélago insomne y las calladas hojas, sumisas ante el más fuerte viento: la sombra.
La noche despertará, y de nada ni nadie podrá decirse que no es parte de la noche
domingo, 6 de febrero de 2011
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acá sí hay imágenes, y cosas que otro no supo decir.
ResponderEliminarQué lindo se lee lo que volandoviste.
Te quiero Vé.
Bé.